En un acto en el que predominó el fuerte sentimiento de unidad latinoamericana-caribeña y la dignidad de los pueblos frente a la arrogancia del imperio, el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) se sumó a la condena mundial al atentado de varios países europeos que pusieron en riesgo la vida del presidente boliviano Evo Morales, siguiendo instrucciones de Washington y violando la inmunidad, la soberanía y el derecho de vida del mandatario. Edgar Ponce, embajador ecuatoriano en La Habana se dirige a la concurrencia.