Entre los detenidos se encuentran los hijos de tres ministros, el presidente de un banco público y un magnate de la construcción.<br /><br /> Las primeras acusaciones apuntan a un fraude en el concurso público de viviendas sociales.<br /><br /> Una operación que para algunos analistas políticos es otra batalla más en la guerra entre el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, y el poderoso movimiento religioso “hizmet” con ramificaciones en el extranjero y mucha influencia dentro de la Policía y la Justicia.<br /><br /> Erdogan ha denunciado lo que para él es un intento de desestabilizar el país sin acusar directamente a la asociación musulmana.<br /><br /> “Los que reciben el apoyo de fuerzas oscuras de dentro y fuera del país no pueden cambiar la dirección de Turquía”, decía Erdogan.<br /><br /> “Hizmet” fue uno de los mayores aliados del partido AKP de Erdogan pero hace un par de años el primer ministro turco empezó a denunciar la excesiva influencia en la vida política de esta organización. La división se acentuó con la decisión del Gobierno de cerrar varias escuelas privadas pertenecientes al movimiento religioso.
