CRÓNICA: Cada nuevo informe nos confirma la sospecha de que los pesticidas son los principales responsables del exterminio masivo de abejas; pero ahora también se empieza a desvelar otra sospecha, que nos da cuenta de la magnitud del problema, y es que lo que mata a las abejas también puede dañar a la salud de los humanos, en concreto pueden afectar al cerebro de los mamíferos en formación, ya sea durante la gestación, o durante los primeros meses de vida. <br />Así lo afirma la última opinión emitida por la Autoridad Europea de la Seguridad Alimentaria (EFSA) que pide restringir el uso de dos pesticidas de uso común el acetamiprid y el imidacloprid, que ya habían sido acusados, en anteriores informes, de ser corresponsables de la muerte masiva de abejas experimentada en las últimas décadas, <br />Pero no se trata de la primera voz de alerta. Investigadores japoneses publicaron en 2012 un estudio que descubría los efectos negativos de la exposición a dichos pesticidas en el desarrollo del cerebro en los fetos y crías de rata. <br />Los efectos son: <br />- Menor espesor de ciertas partes del cerebro, <br />- Reducida sensibilidad acústica, <br />- Menor movilidad <br />- Aumento de la masa corporal. <br />- Reducción en las capacidades de aprendizaje y memoria, <br /> <br />La EFSA pide multiplicar los niveles de riesgo y restringir el uso de estos pesticidas. Ahora es la Comisión Europea la que debe decidir qué hacer y en cuanto la valora la salud de los europeos.