Una tensa calma sigue instalada en el centro de Kiev. Los manifestantes opositores han accedido a prolongar la tregua con la policía, iniciada este jueves, hasta el sábado.<br /><br />Mientras los líderes opositores siguen negociando con el presidente Víktor Yanukóvich una salida a la crisis, en la calle, los manifestantes han levantado nuevas barricadas y ocupado un edificio ministerial.<br /><br />Otros han pedido ante la delegación de la Unión Europea sanciones para los responsables de la violencia. <br /><br />“Deben imponerse sanciones a los diputados, al Gobierno de Ucrania, y lo que es muy importante, a los oligarcas que influyen en la política ucraniana, que controlan a los miembros del Parlamento, y a quienes guardan activos en cuentas bancarias en el extranjero”, señalaba un manifestante. <br /><br />“Queremos mostrar los terribles acontecimientos que están teniendo lugar en Ucrania. Es una matanza. La masacre de gente inocente. Ahora lo denunciamos ante la embajada alemana, y luego lo haremos frente a la de Polonia y la de Austria”, decía un manifestante.<br /><br />Los violentos disturbios, que estallaron el domingo en Kiev, han dejado oficialmente tres muertos, aunque la oposición habla de seis. Unas 300 personas han resultado heridas y decenas han sido secuestradas.<br /><br />“Las sanciones contra las autoridades ucranianas han sido ya impuestas por Estados Unidos, que ha prometido revocar visados a los funcionarios ucranianos responsables de dispersar manifestaciones pacíficas. Ahora los manifestantes piden a Europa que haga lo mismo”, explica Maria Korenyuk, corresponsal de euronews en Kiev.