Enrico Letta es bastante conocido por sus colegas europeos, habla inglés y francés y fue antes eurodiputado. Matteo Renzi hasta ahora alcalde de Florencia, es el líder del Partido Demócrata italiano (PD), la misma formación de centro izquierda a la que pertenece Letta. La crisis política italiana se produce a pocos meses de las elecciones europeas de mayo y de la presidencia italiana de la Unión Europea que comienza en julio.<br /><br />“Debería ser alguien con suficiente fuerza política como para negociar con los jefes de Estado y de Gobierno para elegir a los mejores candidatos. Si Renzi se convierte en primer ministro tendrá que tratar con personalidades que no conoce, él es poco conocido y eso no juega a su favor”, ha dicho Marco Incerti, analista del Centro de Estudios Políticos Europeos de Bruselas (CEPS).<br /><br />La economía italiana crece por primera vez en mucho tiempo aunque de forma débil. Renzi ha prometido acelerar las reformas para impulsar el crecimiento y el empleo y ha dicho que pedirá a Bruselas más flexibilidad para acelerar la inversión.<br /><br />“Tengo la impresión de que Renzi es bueno haciendo discursos, pero luego es un poco como Sarkozy o como Hollande cuando llegó al poder y dijo: Voy a ir a Bruselas y voy a negociarlo todo. La realidad es existe una lucha por el poder es complicada. Alemania va a jugar un papel importante y no va a ser Renzi quien venga aquí y cambie las reglas del juego”, ha explicado James Fontanella, corresponsal en Bruselas de Financial Times.
