El operador de esta moneda virtual con sede en Tokio, que se declaró en quiebra tras denunciar públicamente el robo, ha anunciado que halló el 7 de marzo dicha cantidad , equivalente a más de 115 millones de euros, en un registro de monederos digitales de formato antiguo.<br /><br />Las otras 650.000 siguen sin ser localizadas. Su desaparición supuso un duro golpe para la divisa virtual, poniendo en duda su fiabilidad y con ello su supervivencia.