Los habitantes de la localidad azerbaiyana de Nij son descienden directos de la antigua Albania caucásica. Los Udíes son uno de los pueblos más antiguos del Cáucaso, y preservan en sus tradiciones e idioma una gran historia.<br /><br />El pueblo Udí fue descrito por primera vez por Heródoto en el siglo V a J.C . En la actualidad apenas quedan unos pocos miles de udíes en el mundo. Aquí en Nij viven cerca de 4.000. Y no están muy lejos de lo que fue la capital del antiguo reino de la Albania caucásica, por lo que creen que esta tierra pertenece a los Udíes desde siempre.<br /><br />Oleg Danakiri es el director del Centro de Cultura Udí: <br /><br />“Este reino estaba compuesto por 26 tribus. La tribu de los Udíes era las más poderosa. Tenían su religión, su Biblia, su idioma y su alfabeto.” <br /><br />Desde hace siglos, los Udíes profesan el cristianismo. Y durante el período soviético lograron mantener viva su fe.<br /><br />Esta iglesia fue restaurada en 2007. Los fieles acuden a la cita a pesar de que el sacerdote se encuentra actualmente en el extranjero.<br /><br />“Somos un pueblo muy singular, asegura Robert Mobili, portavoz de la comunidad cristiana udí. Hablamos una lengua caucásica muy poco extendida. Pertenecemos a la rama oriental del cristianismo y queremos restablecer la independencia de la iglesia albanesa en Azerbaiyán “.<br /><br />Los símbolos cristianos son omnipresentes en la vida cotidiana. Y por ejemplo, aparecen en los trajes de los músicos tradicionales, como nos explica Karlen Shirvari, musico traducional udí:<br /><br />“Aquí podemos ver la cruz antigua de la Albania caucásica.<br />Y en la espalda, hay un sol del que salen ocho flechas. Simbolizan la peregrinación a Tierra Santa y significa que la persona que lleva este emblema en su traje ha sido bautizada. “<br /><br />Una vez bendecida la masa, se puede empezar a preparar este plato tradicional llamado Afar. El ingrediente principal es la ortiga, planta silvestre rica en vitamina C. <br />Aquí en Nij están redactando un libro con cien recetas típicas udíes.<br /><br />Rita Danakiri prepara el Afar de generación en generación: <br /><br />“Mi madre me enseñó a hacer este plato. Y ella lo aprendió a hacer de mi abuela. Ahora me toca a mí enseñarle a mi hija. Preparar el Afar no es nada fácil. Los Udíes lo hacemos desde siempre, forma parte de nuestra vida.”<br /><br />Los Udíes hablan azerí, pero muy a menudo se expresan en su propio idioma, el udí. El alfabeto antiguo fue sustituido por las letras latinas, que resultan más sencillas para la enseñanza escolar. <br /><br />Cada año se editan nuevos libros escolares, como los de la profesora Venera Antonova, que trabaja también en la edición en línea de diccionarios Udí-inglés y Udí-Azerí.<br /><br />El poeta Grigori Meshari escribe sus poemas en lengua udí. Hoy ha escrito unos versos a su madre por el día de su cumpleaños.<br /><br />“Mi lengua materna es mi musa. Sus sonidos son tan perfectos que me permiten transcribir la belleza de nuestro mundo.”<br /><br />En Nij, el pueblo anda todo alborotado con los preparativos para un gran día. Hay una boda. <br />Y como manda la tradición, las jóvenes parten el pan sobre la cabeza de la novia con los mejores augurios para su hogar.<br /><br />Al marido le afeita un barbero al que pagan todos los invitados. La hoja afilada marca un ritual de paso, como señala el futuro esposo, Aleksandr Kankalov: <br /><br />“Cada hombre al principio es un bebé, luego un niño y después un adolescente. Pero la única manera de crecer es casarse. Y afeitar al novio marca su transición a la vida adulta . Este es el símbolo de su nuevo estatus.”<br /><br />Este otro ritual se remonta a los días en que los hombres cazaban para alimentar a su familia. Quien acierta en el blanco, tiene el honor de pasarle el arma al novio.<br /><br />“Después de Nij, tomamos rumbo a Gobustan y sus montañas llameantes. Así es como los autóctonos llaman a los famosos volcanes de lodo. Pondremos a prueba sus superpoderes en la próxima edición de Azerbaiyán Life”.
