Cien años después, la música ha sustituido en Lieja el estruendo de las bombas.<br /><br />Con la invasión alemana de esta y otras ciudades belgas la guerra se convirtió en mundial.<br /><br />Hoy en el mismo lugar, los representantes de las otrora potencias enemigas se han dado la mano como símbolo de concordia y convivencia. <br /><br />“Es bueno estar aquí por todos los soldados que dieron su vida en la guerra”, decía una asistente al acto.<br /><br />“Creo que tenemos que recordar a los jóvenes que los conflictos pueden aparecer en cualquier momento y que ya hay demasiadas guerras. Estamos aquí para conmemorar el pasado pero desgraciadamente también para pensar en todos los conflictos que vivimos ahora”, añadía otra.<br /><br />En total 17 jefes de Estado han asistido a una ceremonia que además de hacer memoria del horror ha querido mostrar al mundo que el futuro pasa por la paz y la cooperación internacional.
