El secretario general de la OTAN Anders Fogh Rasmussen ya está en Gales para la cumbre que reúne a más de sesenta jefes de estado o de gobierno en Cardiff y Newport. Unos diez mil policías se han desplegado para garantizar el programa se cumpla.<br /><br />Para bloquear las protestas antimilitaristas la policía ha preparado todos sus sistemas de control de manifestaciones. La crisis en Ucrania y la amenaza islamista en Irak centran cumbre de Gales<br /><br />Para Jan Techau, director del think tank Carnegie Europe: “La OTAN tratará de hacer dos cosas: intentará enviar un mensaje de tranquilidad a sus propios Estados miembros en el este que se sienten amenazados por los nuevos acontecimientos en Ucrania y tratará de enviar un mensaje a Putin; las fronteras en Europa son seguras y más vale que no se atreva a sobrepasarlas”.<br /><br />La OTAN se pasó gran parte de la era post-soviética preguntándose cuál debería ser su papel. Ahora está siendo desafiada por el mismo adversario que nació para combatir.<br /><br />La valoración del enviado especial de Euronews, James Franey: “La identificación de los grandes retos de seguridad será lo más fácil para los líderes de la OTAN. La verdadera pregunta es si van a ser capaces de aglutinar la voluntad política y el músculo financiero para hacerles frente”.