Los rebeldes han capturado a una veintena de soldados ucranianos que han sido trasladados desde el aeropuerto de Donetsk al lugar del ataque al trolebús donde han sido exhibidos delante de una muchedumbre enfurecida.<br /><br /> Los escoltas no han impedido que los prisioneros, vestidos de civil, sean golpeados por varios ciudadanos.<br /><br /> El propio presidente de la autoproclamada República popular de Donetsk ha asistido a la escena, animando a la muchedumbre al decir, públicamente, que deben “ser castigados por haber matado a niños.”<br /><br /> No todos los presentes han reaccionado con ira, algunas personas han mostrado su frustración al considerar que los prisioneros no son más que víctimas del presidente ucraniano. <br /><br /> El ataque de este jueves, que ha dejado varias decenas de heridos, ha sido el más sangriento desde la firma de los acuerdos de paz de Minsk en septiembre.