Científicos polacos del Instituto de Tecnologías de Seguridad “Moratex” han desarrollado un líquido que, una vez introducido en un chaleco antibalas, se endurece tras recibir el impacto de un proyectil.<br /><br /> El líquido es colocado en una bolsa especial que se puede introducir en el interior del chaleco protegiendo así de manera más eficaz a la persona y permitiendo que ésta siga moviéndose con facilidad.<br /><br /> Cuando el chaleco es alcanzado por una bala, el líquido absorbe el impacto y protege los órganos de la persona que lo lleva puesto. Este líquido se modifica dependiendo de la temperatura o de la fuerza que se ejerza sobre él.<br /><br /> “Este líquido es diferente a los demás porque su viscosidad cambia cuando recibe un impacto, explica Karolina Olszewska, responsable del proyecto. Su viscosidad aumenta gracias a las partículas que han sido incluídas en su estructura. Estas partículas consiguen formar una barrera contra cualquier factor externo que intente atravesarlas”.<br /><br /> En los chalecos antibal
