Buenos Aires, 5 may (EFE).- (Imagen: Aitor De Iturria) Bajo el lema "El trabajo sexual es un trabajo", meretrices argentinas repartieron hoy, frente a la legislatura de Buenos Aires, facturas simbólicas con los precios de sus servicios sexuales en una original campaña para reclamar una ley que reconozca sus derechos como trabajadoras. <br /><br />Una atención sanitaria, el acceso a la educación, el ejercicio libre de su trabajo, la organización sindical y la posibilidad de aportar a una jubilación, todos derechos que cualquier otra actividad posee, parecen lejanos para estas mujeres. <br /><br />Argentina no contempla a la prostitución como una actividad legal, pero tampoco la prohíbe, por lo que casi 80.000 prostitutas quedan al margen de las políticas públicas y a merced de riesgos que van desde el temor a perder su hogar hasta la extorsión y la persecución policial. <br /><br /> Algunas pagan, por su casa, una renta tres veces mayor a la de cualquier ciudadano, porque no pueden demostrar ingresos con un recibo salarial, pero eso no garantiza tampoco que estén seguras puertas adentro. <br /><br /> <br /><br />Palabras clave: efe,argentina,prostitucion,regulacion
