El gobierno de Japón limitará las horas extras de sus trabajadores, ya que busca promover que la remuneración esté basada en el rendimiento, más que en las horas laboradas. La ley nipona fija un límite de 40 horas semanales para todas las profesiones, excepto para cargos directivos. Sindicatos japoneses argumentan que la medida implicará que los empleados sean obligados a trabajar más sin recibir un pago justo. teleSUR