Teherán acogió el funeral de 270 iraníes que murieron en la guerra entre Irán e Irak, de 1980 a 1988. Los cuerpos de 175 de los fallecidos, buzos militares, fueron descubiertos recientemente en una fosa común en Irak. Los cadáveres no tenían lesiones y estaban esposados, por lo que podrían haber sido enterrados vivos.<br /><br /> “Esos cuerpos pertenecen a los enfrentamientos que mantuvieron dos países en guerra hace unos años. Ahora ambos luchan conjuntamente contra un enemigo común”. Un enemigo común al que el corresponsal de Euronews hace referencia y que no es otro que el Grupo Estado Islámico. Los funerales tienen lugar casi 27 años después del fin del conflicto.<br /><br /> “Sentimos un gran respeto hacia quienes mueren defendiendo los santuarios sagrados chiíes en Irak. Aunque ya no estén con nosotros, vamos a luchar hasta el último suspiro”, dijo un joven.<br /><br /> Otro hombre afirmó que “es mí obligación defender las fronteras de mi país, como hicieron todos aquellos que murieron. Nos dieron una auténti
