La falta de liquidez de las arcas griegas repercute en los servicios básicos. A pesar de que el Gobierno intenta cubrir gastos esenciales, los conductores y sanitarios de las ambulancias están perdiendo entre 200 y 500 euros cada mes ya que las horas extras o las nocturnas no están siendo remuneradas desde el pasado mes de diciembre. Cuando estaban a punto de iniciar una huelga, el Ejecutivo ha prometido completar los pagos del primer trimestre del año. <br /><br /> Uno de los trabajadores explica que han mostrado “aguante durante mucho tiempo” que entienden que “la situación es dura”. Pero insiste en que ellos también deudas y obligaciones que pagan y por eso han llegado a un punto de ruptura. <br /><br /> Pero el problema es aun mayor. La falta de presupuesto hace que los vehículos no puedan estar a punto. En el centro nacional de emergencias, Georgios Mathiopoulos, presidente del sindicato de ambulancias de Atenas explica que de las 150 ambulancias, un tercio están fuera de servicio por averías que “en
