A cuatro días del paro en el transporte público provocado por pandillas vinculadas con el crimen organizado en El Salvador, vehículos estatales y militares apoyan en el traslado de los ciudadanos a su destino. La policía nacional detuvo a un grupo de pandilleros vinculados a este boicot, mientras, organizaciones sociales denuncian una campaña para desestabilizar al gobierno. teleSUR
