Al igual que una pandilla de amigos, estas ballenas jorobadas están tan cerca que cazan casi en un unísono perfecto. <br />Soplando hábilmente el aire desde profundidades de 600 pies (casi 200 metros), crean una red de burbujas que atrapa a sus presas cerca de la superficie. Luego, con la gracia de nadadores sincronizados, los gigantes de 35 toneladas rompen las olas en el momento justo para devorar a los peces. Como las ballenas necesitan consumir alrededor de 3.000 libras de comida al día (1.360 kilos), es esencial que trabajen como un equipo para acorralar a la mayor cantidad de peces que sea posible. Pueden bucear hasta por 45 minutos, llegar a profundidades de 600 pies y soplar el aire de sus orificios nasales a velocidades de 300 mph. Sus pulmones puede contener 2.500 litros de aire. Cada ballena jorobada puede ser identificada a partir de una marca única en la parte inferior de la cola. Una vez bajo la amenaza de los barcos balleneros, y gracias a las leyes que protegen a la población, la ballena jorobada está aumentando cada año, con unos números actuales estimados en más de 60.000 en todo el mundo.
