25 <br /> <br />Cuando los pensamientos humanos <br />se hallaban en la bolsa de los dioses, <br />te incluyeron como símbolo de Azar <br />en el abecedario de lo impenetrable, <br />de lo que nunca se sabe y es insólito <br />en la existencia de cualquier mortal. <br /> <br />Afirman que el Karma cambia en uno, <br />no importa si es feliz o desdichado, <br />porque nunca la entereza y la razón <br />reinaron en el mundo que habitamos. <br /> <br />Los dioses ya no alteran el destino <br />por antiguos y múltiples errores, <br />pero acatan sus leyes con esmero <br />en el concepto de la Runa Blanca, <br />donde cada individuo es una voz <br />que predica sin tregua en el desierto. <br /> <br />En ti se agrupan las temidas Nornas, <br />amas supremas de la ciencia nórdica, <br />que controlan la fortuna y la miseria <br />mientras deciden el mejor momento <br />para el trance fortuito y sin reversa, <br />incluyendo también a las deidades <br />que padecen su garra omnipotente. <br /> <br />Cultivas varias formas de lo eterno, <br />aquél que jamás comprenderemos <br />y al que nunca podremos escapar, <br />aunque largo se odie y se combata <br />en medio de blasfemias o plegarias <br />que nos impiden descansar en paz. <br /> <br />Algo temible es caminar contigo <br />hasta el origen de lo que se ignora, <br />donde el grito es apenas un gemido <br />que no cruza nuestro blando muro, <br />y afrontar significa simplemente <br />posponer lo que ya es inexorable <br />en aquella dimensión desconocida <br />que cambia nuestras pobres ilusiones <br />por un retazo de papel en blanco.
