DECIMOTERCER YO <br /> <br />Encarno las fuerzas creativas <br />de la naturaleza humana, <br />y suelo ser su protector, <br />aunque a veces destructivo. <br /> <br />Primo hermano del zorro, <br />poseo dones naturales <br />para meterme en apuros <br />y salirme de los mismos. <br /> <br />Por mi aguda inteligencia <br />y mi labia venenosa <br />puedo alcanzar lo que busco <br />en el mundo de los vivos. <br /> <br />Cuando los dioses crearon <br />los hombres y las mujeres, <br />los buitres les construimos <br />la misteriosa escalera <br />que pronto los llevaría <br />desde la Tierra hasta el Cielo. <br /> <br />Pero fue una tontería, <br />porque estos seres ridículos <br />se cansan siempre muy pronto <br />de los mejores regalos, <br />ya que son entes rapaces, <br />usureros y mezquinos. <br /> <br />Como también soy poeta <br />pillé que los girasoles <br />observan constantemente <br />la cara del Astro Rey. <br /> <br />Con ellos fabriqué alas <br />de tan infausta fortuna <br />que cuando se marchitaron <br />di de bruces contra el suelo. <br /> <br />Consciente de que la unión <br />entre la Tierra y el Cielo <br />era un sueño irrealizable, <br />decidí privar a todos <br />del bien de la eternidad, <br />condenándolos a muerte <br />en el reino de las sombras, <br />sin las mieles de la dicha <br />ni las gracias del perdón.
