AGONÍA DEL MAR <br /> <br />El mar, igual que muchos seres, <br />es una inmensa sucesión de olas <br />que viajan sollozantes a su suerte. <br /> <br />En su perpetuo vaivén y su bravura <br />se defiende como lobo herido <br />de la insania feroz que lo asesina <br />cuando ataca sin piedad su vientre. <br /> <br />Ruge y se debate como un dios <br />desterrado del cielo prometido, <br />tras la estocada fatal que lo acribilla <br />contra un fondo de coral iridiscente, <br />en tanto gimen las naves en el puerto <br />donde lloran su desgracia y su partida. <br /> <br />El mar, como ya dije, <br />es una inmensa sucesión de olas <br />con sus crestas de espuma y de ceniza, <br />quebrando agonizantes en la playa <br />como sartas de odio desprendidas <br />de aquel país que idolatró la muerte.
