MI VIDA <br /> <br />No soy un resentido ni estoy triste, <br />no me siento frustrado, <br />simplemente es hora de partir. <br />¡Vivan los cuatro pilares filosóficos <br />sobre los cuales construí mi vida! <br /> <br />La naturaleza quizás no imaginó <br />que un futuro poeta cantaría <br />contra tantas miserias opresoras, <br />verdades soslayadas <br />para vergüenza de nadie <br />e indiferencia de todos. <br /> <br />Envidiosos y cobardes jurarán: <br />su vida fue patética, <br />patéticos su esplendor y su locura, <br />el espejismo ardiente <br />donde quemó sus pupilas marineras, <br />libró sus batallas infinitas, <br />levantó su vuelo de cóndor derrotado, <br />inició la búsqueda de amplios horizontes <br />y remotos firmamentos; <br />patético igual su estoicismo <br />al ver desvanecerse <br />el tonto paraíso de las ilusiones. <br /> <br />Observo mientras tanto al enemigo, <br />en esta hora de credulidad, <br />con sus velas al pairo <br />sobre la mar impalpable de los tiempos, <br />sin puerto, sin muelle y sin estiba. <br />Sonrío y me pregunto: <br />¿Si verán tan patética mi vida?