VEINTIUNO <br /> <br />Los poetas cobardes y cantores <br />que dan la espalda a la nación herida, <br />tendrán su recompensa merecida <br />en parques y recintos delatores. <br /> <br />Morirán cual enfermos ruiseñores <br />al sufrir sin saberlo la estampida <br />que produce el Poder y sus olores, <br />como agua de florero corrompida. <br /> <br />Es lamentable contemplar el domo <br />donde graznan poetas de salón <br />y esas migajas recibidas como <br /> <br />la vil lisonja del falaz patrón. <br />Son egregios peones de alto lomo <br />que se arrodillan a pedir perdón.