Amnistía Internacional (AI) denuncia “crímenes contra la humanidad” en la campaña antidroga del presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte.<br />Así lo asegura en un informe que ha presentado en Manila, que indica que el Gobierno encubre asesinatos a sueldo, falseo de atestados y robos perpetrados por la policía. La oenegé asegura que se trata de una guerra contra los pobres.<br /><br /> “Un alto mando de la policía nos dijo que hay un incentivo por matar a drogadictos. Según su informe, va de 150 a 280 euros por persona ejecutada. El documento indica que si nadie muere, no hay incentivo“l, dice Wilnor Papa, de AI.<br /><br /> Hace dos días Duterte suspendió temporalmente su campaña antidroga después de que el asesinato de un surcoreano evidenciara la corrupción de las fuerzas de seguridad.<br /><br /> La guerra contra el narcotráfico ha dejado en siete meses más de 7.000 muertos, de ellos más de 2.500 a manos de los agentes en supuestos enfrentamientos con sospechosos.<br />
