Durante más de diez años la comunidad de Caimanes, en la zona cordillerana centro-norte de Chile, ha estado luchando contra el grupo económico más grande del país, que opera la mina de cobre Los Pelambres. <br /> <br />La mina estableció un gigantesco tranque de desechos tóxicos que han contaminado las aguas de superficie y subterráneas y han hecho imposible la vida y la agricultura; además de amenazar toda la existencia del valle en caso de terremotos o aluviones, que en Chile son comunes. <br /> <br />Unidos y con unos abogados tenaces ganaron un fallo del Tribunal Supremo. En 2014 que obliga a la mina a restituir las aguas e incluso destruir el tranque. Tras este fallo la minera cambio estrategia y convenció primero a los abogados. A cambio de unos 5 millones de dólares. <br /> <br />Los abogados iniciaron entonces un proceso para convencer a la comunidad de llegar a un acuerdo amistoso a cambio de dinero y ciertas medidas de seguridad. En retorno, cada miembro se comprometía a nunca más presentar una queja y a no oponerse a la ampliación del tranque, uno de los más grandes del mundo. La comunidad se dividió: un grupo siguió adelante con la lucha y otro se resignó. <br /> <br />Continentes se propone debatir esa división, el futuro de la comunidad y del pueblo mismo con representantes de los dos bandos.
