Mientras Corea del Norte decide suspender por el momento sus planes de atacar la isla de Guam, donde se encuentra una importante base militar estadounidense, Estados Unidos y China, el último aliado del régimen juche en la región, han firmado un acuerdo para tratar de mejorar su comunicación militar.<br /><br />Temas como las ambiciones de Pekín por la soberanía en los territorios del mar de China y el apoyo de Estados Unidos a Taiwán han aumentado la tirantez entre estas dos grandes potencias, condenadas a entenderse para evitar un conflicto en la península de Corea.<br /><br />“Creemos que en esta situación todas las partes deben ejercer contención, tomar decisiones correctas y responsables para la gente de cada uno de los países y de la región, para relajar la tensión y solucionar pacíficamente el tema de la península de Corea”, decía Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Exteriores chino.<br /><br />Tanto altos cargos estadounidenses como madatarios de aliados de Washington, como el primer ministro de Corea del Sur, han llamado a retomar el diálogo en contraste con las beligerantes palabras de Donald Trump contra Pyongyang. <br /><br />Incluso el líder norcoreano ha llamado a desescalar el conflicto para evitar un enfrentamiento inevitable.<br />