Ereván, 29 dic (EFE).- (Imagen: Anush Janbabian) Cada año Gevorg Glkhadián, su esposa y sus dos hijos suben caminando a la colina de Tsisernakaberd (la Fortaleza de las Golondrinas), en Ereván, para depositar flores en el monumento conmemorativo a las víctimas del genocidio armenio abierto hace ahora medio siglo.<br /> <br />Palabras clave: efe,armenia,genocidio,monumento
