Los proyectores llevan ya algunos años inmersos en un proceso “liberalizador” en el que han pasado de ocupar un lugar estático en el techo del salón, a la versatilidad de los proyectores de tiro ultracorto, con los que conseguir proyecciones de 100 pulgadas a poco menos de 11 cm de la superficie donde se proyecta.<br />Con esta mejora, los proyectores destierran para siempre el mito de que su instalación es complicada, para simplificarse hasta su mínima expresión.<br />
