<p>De nada servía que se protegiera de la lluvia de escándalos que Michael Jackson acumuló mientras se convertía en leyenda. Su vida y su rostro se demacraron poco a poco. En los ochenta su piel se volvió cada vez más blanca, casi transparente, y su futuro, más oscuro. Unos hablaron de accidentes y enfermedades, otros de la obsesión del "Rey del Pop" por ser blanco.Siempre junto a los niños, reconoció haber sufrido abusos por su padre. Él saludó a sus fans sosteniendo a su propio hijo en el vacío. Pero la polémica llegó cuando su foto quedó estampada en una ficha policial acusado de pederastia. Fue declarado inocente, pero su carrera siguió un descenso vertiginoso.La estrella nunca se apagó, pero su vida de lujos y su afición a las compras hizo que acumulara hasta 400 millones de dólares en deudas, aunque la que más duele es la que le ha dejado a su público.</p>
