<p>"¡Queremos trabajar, queremos trabajar, queremos trabajar!". Fue el clamor de las algo más de 3.500 personas, según la Policía Local, que ayer se manifestaron a favor de la continuidad de la central nuclear de Garoña, pendiente de la decisión política que adopte el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Empleados de la planta y de las 48 empresas que trabajan para ella, fundamentalmente de Miranda y el Valle de Tobalina; representantes sindicales de Castilla y León y responsables políticos de distinto signo secundaron una marcha que tardó más de una hora en recorrer el escaso kilómetro que separó su punto de partida de la plaza de España. El presidente del Gobierno estuvo en el centro de la diana. Durante todo el recorrido se gritaron consignas contra él y fue tildado de "embustero" e "ignorante". Y se incidió también en el carácter seguro de la nuclear. Los manifestantes fueron precedida por un grupo de niños que sostenía un cartel en el que se leía: "Estamos preocupados por el trabajo de nuestros padres. ¿Y tú ZP? Ojalá tus hijos no pasen por esto".</p>
