<p>Un grupo de jóvenes llegados de Sierra Leona, que vivieron el horror de haber vivido una de las guerras más cruentas que han azotado al continente africano, han podido cumplir uno de sus sueños: pasar unas horas con su ídolo: Iker Casillas. El guardameta del Real Madrid viajó dos veranos atrás hasta Madina (Sierra Leona) para observar 'in situ' sus condiciones de vida. Ahora, gracias a la Fundación Real Madrid, a la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y a la gestión de la ONG "Desarrollo y Educación en Sierra Leona" (DYES) dirigida por el Misionero Javeriano Chema Caballero, estos chicos pudieron devolver la visita y viajar hasta la capital de España. Durante el encuentro, los chicos le han regalado al jugador madridista una foto de cuándo estuvo en Madina con ellos.</p>
