<p>Ha estado a punto de volver a suceder. La semana pasada unas familias gitanas intentaban ocupar unos apartamentos de lujo en Mijas pero sin éxito. La historia se ha vuelto a repetir, esta vez, en una urbanización vecina, en Fuengirola (Málaga). El dispositivo policial ha sido suficiente para frenar sus pretensiones, aunque la empresa ha tenido que doblar la seguridad. Se trata de 102 viviendas de protección oficial, que además estaban adjudicadas. No han vuelto a intentarlo en ninguno de los dos barrios, aunque sí se asoman de vez en cuando para controlar las medidas de seguridad. No se descarta que sigan buscando piso.</p>
