<p>Un conductor ha sido condenado a ocho años de cárcel y dos años sin carné por circular cuatro kilómetros en dirección contraria en la A-2. Durante el trayecto se cruzó con más de cincuenta vehículos, que tuvieron que esquivarlo para evitar un accidente, y algunos incluso tuvieron que hacer maniobras bruscas para impedir un choque frontal.&nbsp;El hombre, de 78 años y con domicilio en Barcelona, se detuvo a poner gasolina tras cruzar el túnel del Bruc en sentido contrario.&nbsp;En el momento en el que fue parado por una patrulla de los Mossos d'Esquadra, el hombre, que dio negativo en la prueba de alcoholemia, no supo dar una explicación coherente de los hechos e incluso llegó a negar que condujera en dirección contraria.</p>
