<p>La locura para conseguir entradas estaba prevista, pero no por conocida fue menos impactante. 24 horas antes de la apertura de las taquillas de San Mamés, prevista para las 10.30 horas, los primeros aficionados ya se apostaban en los aledaños de San Mamés. Medio centenar poblaba la zona a las cinco de la tarde, un número que se fue incrementando de manera escalonada conforme el sol se iba ocultando. El Athletic-Sevilla de la semifinal de Copa ha levantado pasiones y ha recordado el ambiente de las ligas y copas conquistadas en los 80, con gabarra incluida. Pero tanta gente acumulada, al final pasó factura y minutos antes de la apertura de las taquillas, empezaron los enfrentamientos entre aficionados que se quejaban de que mucha gente se había colado. La policía tuvo que intervenir e incluso algún aficionado tuvo que ser atendido por un desmayo.</p>
