<p>¿Podrían subsistir con 12 euros a la semana? Es el objetivo que se ha fijado un joven de 25 años en China. Pues Wang Hao lo consigue e incluso le sobra dinero para invitar a su novia a cenar... en casa. Wang Hao toma el metro cada día para ir a su trabajo. Le cuesta dos yuans, unos 20 céntimos de euro. Antes viajaba en taxi y le costaba diez veces más.Fue su primera medida de ahorro cuando se compró su apartamento y vio que no llegaba a fin de mes. Antes nunca ahorraba. Este funcionario chino era uno más de una generación consumista que ahora reconocen que tienen que apretarse el cinturón. Wang decidió marcarse un tope de gastos y en junio fundó el club de los cien yuan por semana. Su objetivo: gastarse de lunes a viernes algo menos de doce euros. Eso es lo que en Pekín valen dos entradas al cine. Y lo va consiguiendo. El blog en el que cuenta su estrategia de ahorro ya cuenta con cien mil seguidores. Wang solía comer y cenar fuera de casa. Ahora el mismo hace la compra y ha aprendido a cocinar con ayuda de su madre. Comer en el trabajo le sale por 90 céntimos. Por eso sus primeros seguidores los tuvo en el trabajo. Pero además le permite agasajar a su novia con una suculenta cena por poco más de un euro, y encima con un menú de comida sana.Antes de ir a dormir, Wang y su novia registran sus gastos diarios. Hay que cumplir el plan, aunque hoy se han pasado dos yuan de más. Apenas dos euros y medio</p>
