<p>Hace solo un año que el expresidente del Gobierno José María Aznar presentó la primera parte de sus memorias. Y parece que en estos doce meses algo ha cambiado. Si en la anterior presentación acudieron Mariano Rajoy y tres de sus ministros. En esta ocasión el expresidente no ha contado con el apoyo de ningún destacado miembro del actual Gobierno de España. Solo estaban el director general de la Polícia y el secretario de Estado de Comercio. Entre el público, tampoco nadie de la dirección del PP salvo Esperanza Aguirre. La expresidenta de la Comunidad de Madrid y su sucesor, Ignacio González, son de los incondicionales del Aznarismo. Ellos, y los que fueron sus ministros. Han ido siete. Y entre las asistencias sorprendía la de quien ha presentado el libro: el exsecretario general de CCOO José María Fidalgo. "Sí, sí, porque es amigo mío José María", se ha justificado. Aznar había ido a hablar de su libro, el de 8 años que ha resumido así: "España protagonizó un salto espectacular". Pero se ha colado la actualidad y ha dado su receta para Cataluña. "Producirá desgarros y problemas evidentes si no se ataja, que se debe cortar y atacar", ha dicho sobre el desafío soberanista de Artur Mas. Y sus incondicionales han aplaudido.</p>
