<p>Al ver cómo ha quedado el traje, roto y ensangrentado, se da cuenta de lo grave que pudo ser, "he vuelto a nacer"comenta Carlos Pazos que tocaba con su grupo de música tradicional en unas fiestas patronales de Ordes. Los seis integrantes iban en un remolque, cuando de pronto escucharon una explosión.&nbsp; No se sabe como ocurrió, pero las bombas que había en el remolque comenzaron a estallar. Con la fuerza de la explosión los asientos salieron disparados. Todos sufrieron heridas, aunque él es el más afectado. Tiene los tímpanos perforados, el brazo y la mano quemada y magulladuras por todo el cuerpo. Ahora se recupera de sus heridas y sobre todo del susto.Para la próxima actuación tendrán que comprar trajes nuevos y renovar los instrumentos.</p>
