<p>Isabel y Vicenta se odian, aunque ninguna sabe bien la razón. Lo cierto es que su caso suma ya diez años de denuncias y cuatro mil folios en los juzgados de Valencia que tras una década han decidido admitir el caso y sentar en el banquillo a Vicenta. Su vecina la acusa de tirarle líquidos -lejía, orín, etc-, de insultarla y amenazarla, incluso de abrir su correo. La denunciante llegó hasta a contratar un detective que grabó varias de estas situaciones. La Fiscalía pide dos años de prisión para Vicenta, 130 mil euros de indemnización y que se marche de la vivienda durante cuatro años.</p>
