<p>Un enorme jardín de amapolas de cerámica rodean la torre de Londres.Un jóven cadete del ejército es el encargado de plantar la última de las 888,246 flores que componen esta imágen.Una por cada soldado fallecido duranto su servicio a la corona británica en la I Guerra Mundial.El motivo es la celebración del Día del Armisticio, donde cada año se rinde homenaje a las víctimas de la Gran Guerra.Uno de los creadores de esta idea comenta el hecho de que la gente pueda identificar una amapola a una vida,puedan ver una amapola y recordar a un familiar, un abuelo o un bisabuelo.Aquellos que quieran hacerse con una de estas flores tendrán que pagar la cifra de 30 euros por cada amapola a través de internet, un 10% de cada venta irá destinado a la caridad. El desmontaje comenzará mañana, pero parte de esta gran plantación, la más cercana al Támesis, aguantará un par de semanas más&nbsp; para que los curiosos puedan seguir vistándolo.</p>
