<p>Ca la Marta o Can Ferrusola. Así llaman a la segunda residencia de los Pujol los poco más de 180 habitantes censados en Queralbs, municipio del Pirineo de Girona, ubicado en un entorno natural privilegiado. La confesión del expresident pilló a los vecinos durante las fiestas del pueblo, y para muchos, fue como un jarro de agua fría. A otros, en cambio, esto de que los Pujol tengan cuentas no declaradas en el extranjero, tampoco parece sorprenderles demasiado. Los Pujol-Ferrusola han pasado aquí todos los veranos de las últimas tres décadas. Marta heredó la casa de su padre, y en estas calles sus hijos corrían en bici con otros niños del pueblo. &nbsp;Por eso, muchos les consideraban unos vecinos más. Hasta ayer, la segunda residencia de los Pujol Ferrusola permanecía cerrada a cal y canto. Después de que estallara el escándalo, los vecinos no tenían muy claro si este verano verían a Jordi y Marta por el pueblo. Sin embargo, algo hacía sospechar que pronto llegaría el expresident. </p>
