Madrid, 17 sep (EFE).-(Imagen: Ramón Ayala) La forma en que relató los abusos que sufrió de niño y cómo la música le mostró un mundo que merecía la pena vivir convirtieron al pianista James Rhodes en un gurú de la divulgación cultural. Con una nueva obra que abunda en esa línea, cuenta cómo España ha tenido un efecto balsámico similar.
