Surprise Me!

La ludopatía, una adicción que no tiene edad

2019-10-09 7 Dailymotion

A Coruña, 9 oct (EFE), (Imágenes: José Cabalar).- Santiago fue víctima de la adicción al juego y, ya rehabilitado, utiliza las redes sociales para ayudar a otras personas. Roberto, que empezó a jugar a los 16 años, lleva doce meses acudiendo a terapia. Antonio es policía nacional y siente que recuperó su vida tras dejar de apostar. Y Ricardo sabe con precisión que ha superado la ludopatía desde el 12 de abril de 2012.<br />Santiago Caamaño, Roberto Fontaneda, Ricardo Barreira y Antonio Regalado proceden de diferentes lugares de España, sus edades oscilan entre los 21 y los 47 años y tienen profesiones muy distintas. Pero todos tienen en común su afán por superar la adicción al juego.<br />Junto a otros exjugadores llegados de diversas provincias, han participado en el XX Congreso Nacional de Ludopatía, organizado a finales de septiembre en A Coruña por la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR).<br />“Empecé a los 16 en las míticas máquinas tragaperras de los bares, pero luego sí que es verdad que a finales de los 16 o principios de los 17 ya comencé a ir a los salones y a las casas de apuestas y eso fue lo que más me enganchó”, describe Roberto Fontaneda en una entrevista con Efe.<br />Este palentino que, siendo menor de edad, fue víctima del juego, a sus 21 años asiste con regularidad a las sesiones de rehabilitación.<br />Pese a ser joven, nunca apostó "online", pues su adicción se centró en el juego presencial que lo tenía absorbido “las 24 horas del día” y relata cómo una sensación de adrenalina y “desahogo” se convertía después en su agonía.<br />“En ese momento no pensabas en nada, estabas concentrado en lo tuyo, en tus tácticas, pero luego sentías una impotencia de decir me he prometido ya veinte veces que no iba a jugar o que mañana no iba a volver y a los diez segundos estás pensando ya en cómo conseguir dinero para volver mañana”, confiesa el joven.<br />Él nunca ha sido capaz de revelar su problema a sus padres, pues fue su madre la que se dio cuenta de que algo le ocurría, pero Roberto le mentía constantemente.<br />“Lo que pasa es que un jugador se caracteriza por engañar, por manipular y por hacer a sus familiares creer lo que uno dice y te crees hasta tus propias mentiras. Tú se lo dices mirándole a los ojos y llorando y jurándole que vas a cambiar. Te lo crees tú mismo porque si no sabes que no se lo va a creer ella, pero sabes que es mentira”.<br />Sin embargo, esos desafortunados momentos se quedaron en el pasado, ya que Roberto sabe que le queda toda una vida por vivir y está motivado para seguir adelante, pues confiesa que nunca en su vida se había sentido tan bien como ahora.<br />Él no es el único exjugador reunido en el Congreso de A Coruña que comenzó a apostar siendo menor de edad.<br />Santiago Caamaño es un coruñés que desde joven fue víctima de la adicción al juego y ahora, con sólo 26 años, y repleto de esperanza, lleva rehabilitado 18 meses.<br />Con tan solo 14 empezó a jugar al póker pero reconoce que fue a los 16 cuando se enganchó y com

Buy Now on CodeCanyon