El pobre animal, en su desesperación se sentó en medio de la autopista esperando que alguien calmara su sed y le ayudara.<br /><br />Varios ciclistas, al verlo no dudaron en parar y asistir al indefenso animal.<br /><br />Tras acabarse todo el agua que los ciclistas portaban en sus cantimploras, decidieron acompañarlo y dejarlo en los árboles mas cercanos.<br />