Estos son los mitos más grandes sobre las variantes de COVID-19.<br />Durante el último mes, las noticias han estado dominadas por informes de variantes de COVID-19 en el Reino Unido, Sudáfrica y Brasil.<br />Ahora esas cepas mutadas se están detectando en los Estados Unidos, lo que deja a muchos sintiéndose inquietos e inseguros.<br />Que no cunda el pánico. Aquí están los cuatro mitos más importantes sobre las variantes de COVID-19:.<br />Mito 1: Las variantes de COVID-19 fueron una completa sorpresa para los expertos en salud.<br />Según los CDC, "los virus cambian constantemente a través de la mutación", lo que significa que se anticiparon estas variantes.<br />De hecho, es probable que las variantes hayan existido por un tiempo, pero los funcionarios de salud simplemente no se dieron cuenta debido a la falta de secuenciación genómica.<br />Mito 2: Las variantes de COVID-19 <br />son más mortales.<br />Según Eric Vail de Cedars-Sinai, las variantes suelen volverse "más infecciosas y menos virulentas".<br />Es "menos probable" que se forme una variante mortal porque los virus quieren propagarse más, no matar a sus anfitriones.<br />Mito 3: Las vacunas actuales no funcionan contra las variantes de COVID-19.<br />Las vacunas de Moderna y Pfizer parecen proteger contra las variantes conocidas de COVID-19, aunque son "menos potentes" contra la cepa de Sudáfrica.<br />Afortunadamente, las plataformas de vacunas de ARNm permiten que los cambios se realicen rápidamente, ya que pueden secuenciar las mutaciones específicas a medida que ocurren.<br />Mito 4: No podemos evitar que las variantes de COVID-19 se propaguen.<br />Todas las medidas preventivas que se utilizan para combatir la cepa original de COVID-19 también pueden ayudar contra las variantes.<br />La herramienta más potente: vacunarse
