Las lilas o jacintos acuáticos, un problema que ha afectado los cauces de los ríos Ozama e Isabela por años, son un indicador de la contaminación ambiental producida por los sectores y empresas que vierten sus desechos en estos afluentes. <br /><br />Algunos expertos consideran que este mal debe tratarse acabando con el origen de la contaminación, pero otra alternativa sería aprovechar los componentes de esta planta para crear combustibles y energía.<br /><br />La doctora en biotecnología Yessica Castro Estévez, propuso en su tesis doctoral una alternativa innovadora y sostenible para tratar esta maleza: la bioconversión de plantas acuáticas invasoras en bioenergía por medio de digestión anaeróbica o biometanización.
