Cuando el diablo no tiene qué hacer, mata moscas con el rabo.<br /><br />Esta tradicional sentencia española puede aplicarse a la perfección a Alberto Garzón.<br /><br />El ministro de Consumo del Gobierno socialcomunista se ha empeñado en su cruzada contra la carne, los zumos, las bebidas azucaradas y la bollería y ha dado un nuevo paso.<br /><br />El que fuera líder de la hoy comatosa Izquierda Unidas se ha lanzado a presentar un libro de 40 recetas de cocina con las que pretende reducir el sobrepeso y, aquí viene la coña marinera, la desigualdad.<br /><br />Básicamente se compone de un recetario con platos poco sugerentes a la vista y, sobre todo, al paladar. <br /><br />Porque el empeño de Garzón es quitar todo exceso y toda alegría en los platos de los españoles. Otra cosa es que lo consiga.
