Francisco José Contreras, que es jurista y catedrático de Filosofía del Derecho en la Universidad de Sevilla, y arrancó su intervención en el Congreso de los Diputados recordando a los separatistas de ERC que Salvador Puig Antich no fue ejecutado por ser anarquista, sino por asesinar a un policía de 24 años.<br />Después, el diputado de VOX entro en materia y por el flanco que más puede doler a Sánchez y sus compinches, empeñados en resucitar el fantasma de Franco y a desenterrar los muertos de 1936.<br /><br />“La radicalización del PSOE en la República fue la causa principal de la guerra civil”.<br /><br />Afirmó tajante Contreras, cuyo discurso en el debate sobre la Ley de Memoria Democrática, la semana pasada, ha levantado ampollas.<br /><br />Contreras hizo un relato de algunos de “los 3.000 asesinatos políticos cometidos la mayoría por la izquierda”, durante la II República, empezando por el de José Calvo-Sotelo, el 13 de julio de 1936, a manos de escoltas del socialista Indalecio Prieto.<br /><br />Contreras afirmó que la elección del 18 de julio de 1936, como inicio del recuento para la ‘memoria democrática’ en la ley no es casual:<br /><br /> “Pretenden ocultar las 3.000 víctimas de la violencia política de 1931 a 1936. Pretenden hacer olvidar que en la II República, ese régimen que la izquierda presenta como una luminosa democracia destruida por el fascismo, los agentes del orden público asesinaban a los líderes de la oposición”.<br />
