<br />Pedro Sánchez es de esos que, con tal de salvar el pellejo, es capaz de ir dejando un reguero de cadáveres por el camino.<br /><br />Incapaz de aceptar que el responsable del batacazo de la izquierda en Madrid, Castilla y León y Andalucía y de la caída del PSOE en las encuestas es él mismo, maniobra para mantenerse a flote y tirará por la borda a todo el que no le sea útil.<br /><br />Adriana Lastra es un ejemplo de ello, como antes lo fueron Ábalos o Redondo.<br /><br />Nadie está salvo en el PSOE, ni siquiera los que le han sido más serviles. Esto lo saben los socialistas y explica el ataque de pánico que recorre la organización. Sánchez es implacable y no sabe qué es la gratitud. Se va a cargar a todo el que no considere rentable de cara a las elecciones generales del próximo año.<br /><br />Va dejar al PSOE como un solar. Lo que sea, antes de asumir que el culpable del hundimiento del Partido Socialista es él mismo. <br />
