Dicen que cuando el río suena es que agua lleva.<br /><br />Y en el caso del programa comandado por la tropa de Risto Mejide en las tardes de Cuatro, 'Todo es mentira', ese caudal lleva una carga importante de rencor.<br /><br />Desde luego, en la jornada del 30 de enero de 2023 quedó patente que aún siguen sus presentadores y cómicos de plantilla muy atragantados con la marcha de uno de sus tertulianos de referencia, el alcalaíno Antonio Naranjo.<br /><br />Este decidió enrolarse en el programa de Sonsoles Ónega, 'Y ahora Sonsoles', de Antena 3. Es decir, del grupo competidor de Mediaset, Atresmedia.<br /><br />Visto lo visto en el espacio del penúltimo día de enero de 2023, estaba claro que se perseguía desde hace tiempo darle un estacazo a Naranjo y, de paso, al espacio de la primera cadena del grupo mediático rival.<br /><br />¿Y cuál fue la ocasión pintiparada para hacerlo?<br /><br />Pues nada más y nada menos que aprovechando la noticia sobre el posible fichaje de Begoña Villacís, la vicealcaldesa de Madrid, de Ciudadanos, por el Partido Popular.<br /><br />Según la periodista Verónica Fumanal, en realidad a la política naranja no se la quiere en el seno de los populares, pero se la ficharía por réditos electorales para luego aparcarla en lo que ella vino a denomina una especie de "chiringuito".<br /><br />Ahí saltó Antonio Castelo a soltar su comentario jocoso que, esta oportunidad, venía con una pizca de mala leche y tirando con bala:<br /><br />¡Ah, ahora lo entiendo! Esto es como cuando se fue Antonio Naranjo a Sonsoles, que dijeron lo hemos fichado, pero en realidad nadie lo quería.