Aquí tienes cuatro cambios rápidos y sencillos que puedes hacer para conseguir una comida mucho más sana.<br />Empezar la comida con unas verduras crujientes y un simple aliño de limón hará maravillas por tu salud.<br />Elija proteínas no cárnicas de alta calidad.<br />Estas fuentes de proteínas están repletas de aceites y vitaminas que normalmente no obtendrías.<br />Elige bien tus bebidas. Si te gustan las bebidas calientes, opta por el café solo.<br />Para una opción fría, prueba la kombucha natural sin azúcar.<br />Los colores de las plantas se deben a unas sustancias químicas llamadas polifenoles, que mejoran la presión sanguínea y la recuperación tras el ejercicio.