SALMO 78<br /><br />Los israelitas han de enseñar a sus hijos la ley de Jehová — El Israel desobediente se rebeló contra el Altísimo en el desierto — Se recuerdan las plagas que hubo en Egipto — El Señor escoge y bendice a Judá y a David.<br /><br />aMasquil de Asaf.<br /><br />1<br />aDad oídos, pueblo mío, a mi ley;<br />inclinad vuestro oído a las palabras de mi boca.<br /><br />2<br />Abriré mi boca en aparábolas;<br />hablaré cosas reservadas desde la antigüedad,<br /><br />3<br />las cuales hemos oído y entendido,<br />y que nuestros apadres nos contaron.<br /><br />4<br />No las encubriremos a sus hijos;<br />contaremos a la generación venidera las alabanzas de Jehová,<br />y su poder y las maravillas que hizo.<br /><br />5<br />Él estableció testimonio en Jacob,<br />y puso ley en Israel,<br />la cual mandó a nuestros padres<br />que la hiciesen saber a sus ahijos,<br /><br />6<br />para que lo sepa la generación venidera,<br />los hijos que nazcan;<br />y los que se levanten lo cuenten a sus hijos,<br /><br />7<br />a fin de que pongan en Dios su confianza<br />y no se olviden de las obras de Dios,<br />sino que guarden sus mandamientos;<br /><br />8<br />y no sean como sus padres,<br />generación contumaz y arebelde,<br />generación que no dispuso su corazón,<br />ni cuyo espíritu fue fiel para con Dios.<br /><br />9<br />Los hijos de Efraín armados, flecheros,<br />volvieron las espaldas en el día de la batalla.<br /><br />10<br />No guardaron el aconvenio de Dios<br />y rehusaron andar en su ley;<br /><br />11<br />y se olvidaron de sus obras<br />y de las maravillas que les había mostrado.<br /><br />12<br />Delante de sus padres hizo amaravillas<br />en la tierra de Egipto, en el campo de Zoán.<br /><br />13<br />aDividió el mar y los hizo pasar;<br />contuvo las aguas como en un montón.<br /><br />14<br />Y los aguio de día con la nube,<br />y toda la noche con resplandor de fuego.<br /><br />15<br />aHendió las peñas en el desierto,<br />y les dio a beber como de grandes profundidades,<br /><br />16<br />pues sacó de la peña corrientes<br />e hizo descender aguas como ríos.<br /><br />17<br />Pero aun así siguieron pecando más contra él,<br />rebelándose contra el Altísimo en el desierto,<br /><br />18<br />pues tentaron a Dios en su corazón,<br />pidiendo acomida a su bantojo.<br /><br />19<br />Y hablaron contra Dios,<br />diciendo: ¿Podrá Dios poner mesa en el desierto?<br /><br />20<br />He aquí, ha herido la peña, y brotaron aguas<br />y torrentes se desbordaron.<br />¿Podrá él también dar pan?<br />¿Proveerá de carne a su pueblo?<br /><br />21<br />Por tanto, oyó Jehová y se indignó;<br />afuego se encendió contra Jacob<br />y el furor subió también contra Israel,<br /><br />22<br />por cuanto no habían acreído a Dios<br />ni habían bconfiado en su salvación.<br /><br />23<br />Aun así, mandó a las nubes de arriba,<br />y abrió las puertas de los cielos,<br /><br />24<br />e hizo llover sobre ellos maná para comer,<br />y les dio atrigo de los cielos.<br /><br />25<br />Pan de ángeles comió el hombre;<br />les envió comida hasta saciarlos.<br /><br />26<br />Hizo soplar el viento asolano en el cielo,<br />y trajo con su poder el viento del sur,<br /><br />27<br />e hizo llover sobre ellos carne como polvo,<br />y aladas aves como arena del mar.<br /><br />28<br />Y las hizo caer en medio de su campamento,<br />alrededor de sus tiendas.<br /><br />29<br />Y comieron hasta saciarse;<br />les cumplió, pues, su deseo.<br /><br />30<br />No habían quitado de sí su antojo;<br />aún estaba la comida en su boca,<br /><br />31<br />cuando vino sobre ellos el furor de Dios,<br />e hizo morir a los más robustos